EL GALLO SIGUE FELIZ Y SUBIENDO. YA ESTA CLASIFICANDO OTRA VEZ PARA EL REDUCIDO TRAS GANARLE AL QUE NUNCA PODIA GANARLE : FERRO. VICTORIA FESTEJADA PERO SUFRIDA

Morón pudo lograr, esta vez, lo que nunca, o muy pocas veces. Ganarle a Ferro. El conjunto de Caballito tiene una gran paternidad sobre el Gallo a través de los años. Quizás, por ese mismo motivo, costó tanto el triunfo. Y quizás por eso mismo....... SIGUE >, también, en la cancha o en su casa, el interminable desahogo, los puños apretados, el festejo final, y el tan esperado "por fín". Lo cierto, y lo que mas cuenta, en definitiva, para todos, es que Morón volvió a sumar 3 puntos, y así, logró recuperar la envidiable ubicación para disputar el reducido. El Gallo ocupa ahora, una expectante tercera ubicación, a cinco puntos del puntero Guemes, y a dos del segundo, Barracas Central. Restando 15 fechas para finalizar, todo puede pasar, por eso, lo mas importante, es seguir ahí, y el equipo de Bovaglio lo está logrando.

El partido : Esta vez, Morón, también logró algo que no es tan habitual, marcar un tanto en los primeros minutos del partido. Un golazo, de palomita de Alan Schonfeld, que dejó parado al arquero de Ferro. Parecía, de ahí en adelante que Morón tendría una tarde favorable y tranquila, porque pasó a dominar las acciones, ante un confundido equipo visitante. Sin embargo, así y todo, los verdolagas se las ingeniaron para complicar un par de veces al arquero del Gallo, Bruno Galván, que respondió espectacularmente, demostrando claramente, lo importante para todo equipo con aspiraciones, contar con un buen arquero, y Morón, eso, hasta aquí, lo pagó bastante caro. Así, Morón mantuvo la diferencia alcanzada, sin volver a lastimar, pero dominando la mayor parte de un partido, que no tuvo mucho de entretenido. En el segundo tiempo, el partido se fue desdibujando cada vez mas. Porque Morón ya tampoco pudo mantener la iniciativa, y Ferro, insistió en la búsqueda del empate, sin orden, y en forma desordenada. Sin embargo, Galván volvió a tener un par de atajadas sobresalientes, para que no se concretara el empate. Así fue hasta el final del partido, Morón aguantando como sea, y Ferro atacando, pero sin claridad alguna. Hasta que llegó el final, y el Gallo pudo festejar, al fín, ganarle a Ferro, algo a lo que, la verdad, no estaba acostumbrado. En buena hora el triunfo, que, aunque complicado y sufrido, no importa, total, para volver a jugar bien hay tiempo.