Un hombre sufre el robo de su automóvil, un Peugeot 2008, a mano armada, atacado por dos delincuentes en Haedo, partido de Morón. Inmediatamente, le avisa a un familiar suyo, a quien le cuenta que su teléfono había quedado en el auto. Entonces, Gustavo Giacchino, que es .......... SIGUE > Defensor General Adjunto del Departamento Judicial de Morón, rastreó el teléfono de su familiar y, dos horas después, fueron a buscar el vehículo al barrio Envión de Haedo, a metros de la sede de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), ubicada entre las calles París y Directorio. Al llegar al lugar encuentran al vehículo estacionado, pero sin personas adentro. El funcionario judicial se comunica, entonces, con la seccional de Haedo, donde se había realizado la denuncia por robo, y con la aseguradora para avisar sobre el hallazgo del auto. En ese momento, se acerca al auto, el sospechoso con las llaves del Peugeot 2008, siendo reconocido por el hombre robado, como uno de los dos delincuentes que unas horas antes lo habían asaltado. Fue así, que ambos deciden enfrentarlo. Al ser abordado, el delincuente, entonces, intenta sacar un arma que llevaba en la cintura, pero Giacchino reacciona antes, y responde rápidamente a los tiros. Fue así, que rápidamente, se produce un brutal tiroteo entre ambos, pero que termina con el delincuente gravemente herido, que aún así, pudo subir al auto, intentando huir, aunque a las dos cuadras, choca. Así y todo, pudo bajar del auto e intentar escapar a pie, lo que no pudo concretar, ya que fue detenido por los efectivos de la comisaría de Haedo que llegaron al lugar tras el llamado previo del funcionario judicial. El delincuente, muy herido, tuvo que ser trasladado de urgencia a un hospital de la zona, en el que se encuentra en grave estado, con serio riesgo de vida. Según al primer informe médico, habría sufrido al menos tres impactos de bala: uno en la cabeza y dos en el tórax. La fiscalía N°7 de Morón consideró que el accionar de Giacchino fue en legítima defensa. El caso sigue siendo investigado por la fiscalía, a cargo de Matías Rapazzo y Hugo Ravisino, y hasta el momento no dispusieron ninguna medida restrictiva para el funcionario judicial, quien, además, contaba con la habilitación correspondiente para tener el arma que utilizó en el enfrentamiento con el delincuente.
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