Cerquita de la punta : Morón se la tenía que jugar, y se la jugó. Sin embargo, no lo pudo ganar para alcanzar la punta del torneo. El equipo mejoró mucho, tuvo ocasiones, y estuvo muy cerca de ganarlo, pero no fue suficiente, y se....... SIGUE > quedó un poco frustrado. Pero esa frustración no durará mucho, ya que hay que ver las cosas fríamente, y Morón mantiene una posición de privilegio. Está ubicado tercero, a un punto del segundo, Guemes, y a dos del primero, Barracas. Es decir, que está muy cerca, y con un par de resultados favorables, puede alcanzar el objetivo principal. Pero, ojo, Morón, tampoco se puede descuidar, porque tiene a tan solo un punto, al rival, que justamente recibirá en la próxima fecha, Brown de Adrogué. Sin embargo, el peligro se acrecienta, porque, ahí nomás, a tan solo tres puntos, hay nada mas y nada menos que cinco equipos acechando.
Esto muestra una paridad, en medio de un torneo muy parejo. El Gallo debe apretar los dientes, jugar con la misma actitud que lo hizo este jueves con Rafaela, y así, muchas serán las posibildades, que pueda concluir en una posición, envidiada por los demás.
El partido : Este partido con Atlético Rafaela, por la circunstancia por todos conocida, cuando las luces del estadio jugaron una mala pasada, se jugó dividido en dos. Uno, el que se jugó el 10 de setiembre, hasta los 15 minutos, y en el que el Gallo no la pasó muy bien. El equipo, desconocido, era superado por los santafesinos, que también contaron con las mejores situaciones. El arquero Bruno Galván, en una gran actuación evitó que Morón tuviera que aguardar al día de hoy, con el marcador desfavorable. Hasta que se llegó al día de hoy, para completar esos 30 minutos. Fueron dos etapas, divididas en dos tiempos de 15. Pero esta vez, todo fue distinto. Fue otro Morón, que, ambicioso, intentó desde el primer minuto llevarse por delante al equipo de Otta. Pasó que, este, muy bien parado, resistió los embates del Gallo, y hasta tuvo sus chances también. Sin embargo, la chance mas clara estuvo dada en un evidente y claro penal no sancionado, cuando Schoenfeld fue víctima de un agarrón en el área. El árbitro ?, bien gracias. En la segunda mitad, se acentuó el dominio del Gallo, pero esta vez con mucha mayor peligrosidad, y estuvo en cuatro ocasiones muy cerca de anotar, siendo la mas clara un mano a mano, que Orozco dilapidó en forma, casi increíble. Así, Morón cambió su imagen, y mas allá del empate, y el no haber podido llegar a la punta, su actuación dejó conforme a todos.
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