Críticas exageradas y falta de paciencia : Morón atraviesa un mal momento, que duda cabe. Tres resultados adversos, con igual cantidad de derrotas, son muestra clara, que el equipo está teniendo problemas, y no le encuentra la vuelta para revertir la situación. Por este motivo, comenzaron a llover críticas. La inquietud de los hinchas, se demuestra en la falta de paciencia que está llegando, diríamos, ya, a un punto límite. Sin embargo, todas esas críticas, y esa falta de paciencia, es un tanto apresurada e injusta. Sobre todo, teniendo en cuenta, que el equipo, a pesar de tampoco llegar a jugar bien o lucirse (excepción del partido en Mar del Plata) unas pocas fechas atrás, obtenía buenos resultados en general, se mostraba fuerte, y mantenía gran cuota de solidez y firmeza. Esto, esta mala racha, se puede deber a distintos motivos o factores, que en el fútbol, sobran, y hay miles de ejemplos. Ejemplos, en los que, perseverando, muchas veces, se logró revertir la situación, y volvieron a darse los buenos resultados, y tantas otras veces, en que se dio la situación inversa, y la situación se agravó, con un final de cambio inevitable. Como será en esta oportunidad, para el Gallo ?, se verá, porque nadie puede adivinarlo, pero habrá que seguir confiando en que esto se pueda revertir ....hoy por hoy, es lo mas aconsejable, y conveniente.
La derrota en Mendoza : El partido en la tierra del sol y el buen vino, fue un nuevo golpe, para este equipo, que, desde hace un par de fechas, no logra sacar adelante los partidos, y sigue con problemas de funcionamiento. Ante Independiente Rivadavia, en el primer tiempo, verdaderamente, deambuló perdido en la cancha, y fue superado claramente por el local, que se puso en ventaja con toda justicia. Sin embargo, en el segundo, y con un par de cambios, Morón, se recompuso. Tuvo mas la pelota, y llegó mas al arco local. Así, llegó el empate, con una buena arremetida de Kevin Gissi (la ley del ex-). A partir de ahí, el Gallo no aprovechó totalmente la situación, y dejó venir otra vez a los locales. Sin embargo, contó con otra muy buena oportunidad, que desperdició, también Gissi. De haberla concretado se ponía en ventaja, y ahí si, seguramente los mendocinos hubieran sido atrapados por un estado de confusión y desesperación que, muy probablemente, los hubiera neutralizado. Pero no fue así, y lamentablemente para Morón, el local insistió y encontr´el segundo, en una jugada que aprovechó un par de errores defensivos de la defensa moronense. Difícil revertirlo, porque el local ganó en confianza. Así y todo, el Gallo tuvo una clarísima para empatarlo, cuando Alvarenga reventó el travesaño. No hubo suerte, y se sumó una nueva derrota. Ante Atlanta, el puntero del torneo, estará la ocasión inmejorable, para dar vuelta todo esto, y volver a la senda victoriosa. Será un partido decisivo.
La derrota en Mendoza : El partido en la tierra del sol y el buen vino, fue un nuevo golpe, para este equipo, que, desde hace un par de fechas, no logra sacar adelante los partidos, y sigue con problemas de funcionamiento. Ante Independiente Rivadavia, en el primer tiempo, verdaderamente, deambuló perdido en la cancha, y fue superado claramente por el local, que se puso en ventaja con toda justicia. Sin embargo, en el segundo, y con un par de cambios, Morón, se recompuso. Tuvo mas la pelota, y llegó mas al arco local. Así, llegó el empate, con una buena arremetida de Kevin Gissi (la ley del ex-). A partir de ahí, el Gallo no aprovechó totalmente la situación, y dejó venir otra vez a los locales. Sin embargo, contó con otra muy buena oportunidad, que desperdició, también Gissi. De haberla concretado se ponía en ventaja, y ahí si, seguramente los mendocinos hubieran sido atrapados por un estado de confusión y desesperación que, muy probablemente, los hubiera neutralizado. Pero no fue así, y lamentablemente para Morón, el local insistió y encontr´el segundo, en una jugada que aprovechó un par de errores defensivos de la defensa moronense. Difícil revertirlo, porque el local ganó en confianza. Así y todo, el Gallo tuvo una clarísima para empatarlo, cuando Alvarenga reventó el travesaño. No hubo suerte, y se sumó una nueva derrota. Ante Atlanta, el puntero del torneo, estará la ocasión inmejorable, para dar vuelta todo esto, y volver a la senda victoriosa. Será un partido decisivo.
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