SE CUMPLIERON 8 AÑOS DEL TRASLADO DEL ESTADIO. TANTOS RECUERDOS Y TANTAS EMOCIONES DE UN ESTADIO EN EL CUAL MORON CRECIO Y ESCRIBIO LA HISTORIA MAS GRANDE

Imposible no emocionarse. Imposible que los recuerdos no  impacten. También se puede sentir nostalgia, añoranza, melancolía, tristeza, pesadumbre, pena, porque no ?. Si allí el Gallo ha escrito en el viejo estadio de Brown y La Roche su mas rica historia. Allí, cada uno que...... SIGUE > lo tuvo como su segunda casa, durante años y años, seguramente podría contar miles de historias y anécdotas. De las felices, y de las otras, porque todas, unas y otras, han servido para afirmar el sentimiento, la pasión por los colores, por el rojo y blanco, y por esa palabra mágica de 5 letras que conmueve cuando se la nombra : MORON. Fueron 57 años. Cuantas partidos, y verdaderas batallas ganadas. Campeonatos con vuelta olímpica incluída. Ascensos. Inauguraciones. Hasta que llegó el día, el 26 de Mayo, y la despedida. Y allí, los sentimientos encontrados : contento por ir a la nueva casa, nueva, mas grande, pero a la vez no estar feliz por ello. 

Que historia !! : Entre tantos recuerdos e historias vividas, se pueden citar los campeonatos logrados : los mas viejos recordarán el ascenso a la primera B, en 1959. En esos años, Francisco Urbano, como Presidente, también comenzaba a escribir su rica historia al frente del club. En 1.969, al empatar 0 a 0 con Unión de Santa Fé, se da el gusto de lograr el ascenso a la primera división del fútbol argentino. El Gallo llegaría, así, a su punto mas alto de su rica historia : jugar en la Primera A. El Presidente Virgilio Machado Ramos, iniciaría así un camino de éxitos y logros. La iluminación del estadio, cuando muy pocos equipos (hasta de primera) la tenían, la construcción de la tercer tribuna de cemento, ver jugar al Cosmos, a la selección de Alemania oriental, a Ríver, a Boca, fueron hechos que transformaron y galardonaron al estadio de un Gallo, que buscaba un lugar en lo mas alto del fútbol argentino. Luego llegaron descensos, pero al poco tiempo, ascensos también. En 1.980, al vencer a Deportivo Merlo por 4 a 2, Morón se volvió a dar el lujo de salir Campeón, y a la vez, dejar el incómodo lugar de la primera C para volver a la B. 10 años mas tarde, en 1.990, vino el recordado y festejado ascenso al Nacional B. Lo obtuvo al vencer a Defensores de Belgrano 2 a 0, con una multitud de testigo, en un estadio que quedó chico. Estos ascensos, también con el Dr Machado al frente del club. Años mas tarde, la vuelta a la B, hasta que llegó el adiós definitivo, se trasladó el estadio, y a comenzar desde 2.013, una nueva vida, como quien dice, en el Nuevo Francisco Urbano. Y allí, ya con Alberto Meyer de Presidente, llegó el ascenso al Nacional B, por el que hubo que esperar 27 años. Fue, ese, el último gran festejo que vivió su gente. Una categoría que a Morón le sienta mejor, como paso previo a lo que tanto ambiciona : jugar en la primera división, entre los grandes. Quizás no sea lo mejor dar nombres, ni de grandes, de enormes jugadores que han pisado el césped del viejo estadio, porque fueron tantos, que sería injusto no poder nombrar a todos. NI tampoco sería justo, nombrar a algunos hinchas, muchos de los cuales hoy alientan desde el cielo. Lo que si, es justo, es recordarlo como lo recordamos aquí ......con la misma pasión, y la misma emoción, tal cual, igual a la que vivíamos cada sábado que uno iba a Brown y La Roche.