Cuanta bronca y dolor. Bronca, como siempre la tenemos cuando se va buena gente, y dolor, porque fue demasiado inesperado e injusto. Edgardo Antoñana se había convertido en una costumbre inamovible. Sábados y Domingos, a disfrutar con sus enojos, salidas y comentarios junto a su compañera ideal : Dominique. Una frase suya, lo pintaba de cuerpo entero : "Argentina es un país con héroes anónimos y sinverguenzas famosos", genial Edgardo, como todas sus acotaciones, comentarios o enojos. Hay una frase célebre de Aristóteles : "Cualquiera puede enojarse, eso es algo muy sencillo. Pero enojarse con la persona adecuada, en el grado exacto, en el momento oportuno, con el propósito justo y del modo correcto, eso, ciertamente, no resulta tan sencillo". Y Edgardo, tan famoso por sus enojos, cumplía con esto, a rajatabla. Por eso era tan querido, y hoy, tan reconocido. Una carrera periodística intachable, con pasos periodísticos por Canal 7, Canal 9, Europa, revista Gente, y como productor con Susana Giménez. Otra cosa que lo distinguía, y el, trataba siempre de resaltarlo : fue rescatista de perros de la calle, en Cariló, donde vivía, y hasta había construido su propio refugio. Que mas hacía falta para entender porque era tan querido, una excelente persona, y un tipazo de aquellos ?, nada, nada mas, sin embargo sus cualidades profesionales y personales, hacían que la gente se encariñara cada vez mas. Por eso, asombró ver tanto dolor, tanta repercusión en todas las redes sociales. Increíble, casi diríamos, hasta insólita, la cantidad de mensajes con que lo recordaron y reconocieron. Se lo merecía Edgard, como le decía Dominique. Lo que no se merecía, ni la gente tampoco, era que se fuera así, que nos abandonara tan pronto ....... Lo que se lo va a extrañar !!