Por la mañana : Pasaron ya tres años de ese negro día. Tres años, que los familiares y amigos de las víctimas arrastran ese dolor enorme. Por eso, realizaron, primeramente, un acto por la mañana en el andén 1 de la estación terminal del Sarmiento en Once, donde el 22 de febrero de 2012 se produjo lo que nunca nadie hubiera deseado : el choque que dejó 51 muertos y cientos de heridos. Allí, el actor Héctor Bidonde leyó un documento en el que se reclama, una vez mas, el esclarecimiento del caso. En medio del sentido acto, otra de las personas que tomó la palabra fue Juan Carr, titular de Hambre Cero, que agradeció a los presentes por su lucha y deslizó una frase muy impactante : “No sabemos cuántos accidentes se evitaron gracias a su lucha”. Al mediodía, continuando con la recordación del día, se llevó a cabo una misa en la Catedral Metropolitana.
El acto central : La culminación de la jornada fue a la noche, en Plaza de Mayo, ante una multitud. Distintas personalidades, ademas, participaron del acto : el premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, quien dijo “Se llenaron los bolsillos pero no mejoraron la insfraestructura”.
La titular de la Agrupación por el Esclarecimiento de la Masacre Impune de la AMIA, Laura Ginsberg, y el dirigente Gustavo Vera, de la organización La Alameda, que expresó “Memoria ya la tenemos, lo que falta es Verdad y Justicia”. Antes, se leyó un documento leído por María Luján Rey y Paolo Menghini, los padres de Lucas, que, entre otras duras palabras, expresaron : "El gobierno de Néstor Kirchner, y los posteriores de Cristina Fernández de Kirchner tuvieron el tiempo y el dinero para evitarnos este dolor. No sólo no lo hicieron, sino que cobijaron bajo su ala uno de los ejemplos más terribles de la corrupción de este gobierno. Lo de ahora es una inversión tardía y una búsqueda desesperada de votos, sin que los muertos les importen. .........................
.............Los testigos describieron con lujo de detalles el estado de los trenes. Rotos, corroídos, con agujeros en paredes y pisos, sin ventanas, con puertas que no cerraban, con goteras, etc. Las espantosas condiciones del servicio también fueron descriptas: no tenían horarios, las demoras eran constantes, y no existía el control por parte de las empresas.Quedó probado en las pericias que los trenes como el chapa 16 tuvieron su última revisión general en el año 1997, 15 años antes de la tragedia. ". Palabras que fueron interrumpidas constantemente por los aplausos de la enorme cantidad de gente reunida allí, que entre dolor, indignación, y bronca, cerraron la noche, gritando, como siempre el reclamo característico : “justicia por los muertos y heridos de once”. Para el final, se dio la presentación de la banda de rock Las Pastilla del Abuelo. >>>
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