UNA OLA DE INSEGURIDAD QUE NO FRENA Y SE MULTIPLICA. SE SUFREN NUEVOS HECHOS EN TODO EL OESTE Y EL CONURBANO. MORON, MERLO, RAMOS MEJIA, HAEDO Y AHORA JOSE C. PAZ, DONDE ASESINARON OTRO CHICO DE 17 AÑOS.

El crimen de Roberto, el kiosquero de Ramos Mejía acaparó la atención de la opinión pública, y de todos los servicios de noticias durante varios días. Fue un hecho que impactó y conmocionó, por sus características, y también por la víctima, que era una persona tan querida en la zona. Sin embargo, la inseguridad continuó como si........ SIGUE > nada, con nuevos hechos en todo el Oeste, aunque en rigor de verdad, no existe localidad en todo el conurbano que no la sufra. Los noticieros de la TV, pareciera que les resulta imposible dar las crónicas sobre la inseguridad, porque es muy común ver una noticia con un video en uno, y pasar a otro canal, y ver otro hecho diferente, pero cun delito igual, o parecido. Llega un momento que a todos les pasa, los hechos son tantos, que es imposible cubrirlos a todos, o informarlos, y es por eso, que, muchas veces hay que optar entre varios, y elegir viralizar los mas importantes o graves. Aquí, aunque sea resumidamente, cubriremos varios hechos nuevos, algunos mas graves, otros menos, posteriores al triste episodio del crimen de Roberto : 

Ramos Mejía : Un hombre fue robado y resultó herido en el hombro, a metros del comercio donde el domingo asaltaron y mataron al kiosquero Roberto Sabo, en Ramos Mejía. El hombre dijo que dos motochorros lo interceptaron, y le sacaron el celular. Mostró el corte que le hicieron en el hombro, a pesar de la fuerte presencia policial en el lugar. Previo a este asalto hubo otro intento de robo en una heladería a metros del kiosco también, cuando dos motochorros intentaron robarle a un cliente una cadena de oro que llevaba puesta. A los pocos días del crimen de Roberto, y a tan solo a 13 cuadras del kiosco donde lo mataron,  delincuentes atacaron nuevamente, al interceptar a un joven que iba a jugar al fútbol, lo corrieron y le robaron la mochila y otras pertenencias; los asaltantes iban en un auto que, poco antes, le habían arrebatado a una mujer.

La Matanza : Mientras familiares y amigos de Roberto Sabo reclamaban Justicia el domingo pasado frente a la comisaría 2° de Ramos Mejía por el crimen del kiosquero, e incluso el ministro de Seguridad Bonaerense, Sergio Berni, se hacía presente en el lugar, a muy pocos kilómetros de allí, en González Catán, también en el partido de La Matanza, mataban a otro vecino. René Mendoza Parra, de 78 años y nacionalidad boliviana, era referente social del barrio Fátima, de González Catán. Lo asesinaron a balazos dos hombres en un ataque, que se sospecha, está relacionado con su labor comunitaria y su lucha contra la inseguridad y el avance narco en el lugar.

Merlo : En una parada de colectivos de Merlo, hubo un violento asalto contra un efectivo de la Policía de la Ciudad. El policía, de civil, fue atacado por tres delincuentes que le gatillaron en la cabeza para robarle el celular y su arma reglamentaria, mientras esperaba el colectivo en la esquina de French y Julián Castro. Allí, fue sorprendido por los tres asaltantes, que lo rodearon y, a punta de pistola, le exigieron que entregara el teléfono y su mochila. Mientras le apuntaban, lo obligaron a sentarse. En ese momento, dos de los delincuentes lo intimidaron y gatillaron sus armas, pero los proyectiles no salieron. Sin embargo, el policía pudo disparar y los delincuentes huyeron a toda carrera. Dos de los ladrones cayeron heridos, uno de ellos, a dos cuadras de ahí, y fueron detenidos por efectivos de la comisaría local que llegaron al lugar por un vecino que llamó al 911.

Morón : Dos hechos, fueron los que sufrieron vecinos de la zona. Primero, uno, en una fiambrería ubicada en Pueyrredón al 500. Un delincuente ingresó al local, y a punta de pistola amenazó a la mujer que estaba atendiendo, mientras le exigía todo el dinero, y apuntaba peligrosamente. La mujer, que vivió momentos de mucha tensión, no se resistió, le dio la plata, y el ladrón se marchó del lugar totalmente apurado. El otro, cuando una mujer baja de su auto, con dos chicos que venían del colegio son víctimas de la inseguridad. Bajaron los tres a hablar con la mamá del segundo niño cuando fueron sorprendidos por dos delincuentes que les arrebataron las llaves del automóvil que se encontraba frente a ellos estacionado. Lo extraño fue que, uno de los dos delincuentes va hasta el vehículo, busca las dos mochilas de los chicos y se las deja en la vereda. A continuación, si, concretan el robo, y huyen con el vehículo.

Haedo : Una mujer estaciona su auto en pleno centro de Haedo, a tan solo una cuadra de la avenida Rivadavia. Ni bien baja, se arrima y frena otro auto, del que bajan dos delincuentes armados para robarle. Por suerte, la mujer reaccionó muy velozmente y salió corriendo, y se pudo refugiar en una casa. Uno de los ladrones abre la puerta y ve que no está la llave en el auto (se la había llevado la mujer), por lo que desisten y se marchan sin haber podido concretar el robo.

José C. Paz : Yoel Sánchez, de apenas 17 años, fue asesinado en un intento de robo de 4 puntazos con un cuchillo, mientras atendía un local de Panadería en la esquina de Cumaná y Martín Coronado, de José C. Paz. Según se pudo conocer, Yoel, se habría interpuesto entre el criminal y otro muchacho,  a quien el agresor también intentó apuñalar. El sospechado del crimen, que se entregó en las últimas horas, es Claudio Hugo Gastón González, de 43 años, quien tenía un pedido de captura y contaba con varios antecedentes. Además, según vecinos, era conocido por el barrio. Luego de cometido el brutal crimen, y sin haber podido robar nada, el asesino se fugó en bicicleta, y en el camino, perdió un celular y la posible arma homicida, un cuchillo de carnicero. Tras el crimen de Yoel se originó una reacción inmediata de los vecinos del barrio, quienes se dirigieron hasta la comisaría, ubicada muy cerca a unas cuadras, en reclamo de justicia por el crimen y por más seguridad. Se cortó la calle, y la gente hizo oir su reclamo a los gritos y algunos golpeando cacerolas.