MUY BUEN PARTIDO DEL GALLO QUE JUGO MEJOR Y MERECIO GANAR. CON LA MISMA ACTITUD DE HOY LAS CHANCES SIGUEN INTACTAS Y PUEDE DAR EL GOLPE DE VISITANTE EN QUILMES

No terminó de la manera ideal, la que todos deseaban, pero tampoco terminó de una forma negativa, o que no se pueda sacar adelante. Morón empató un partido por el que había hecho bastante mas que su rival para ganarlo, pero entre las circunstancias propias de un partido de fútbol, y la fortuna que a veces también juega, sumado a una tarde repudiable del árbitro Herrera, hicieron que los 3 puntos no pudieran...... SIGUE > quedar en el oeste. Fue un partido durísimo, tanto para uno como el otro, y ahora, por la igualdad final en 2, todo se definirá a la vuelta en Quilmes. será allí, puesto que, estos terminaron el torneo en una ubicación mejor en la tabla (segundos los del sur, y los del oeste, cuartos). En el partido revancha, cualquiera de los dos que triunfe, obviamente, ya está, sigue participando y va a semifinales ante el perdedor de la final (Tigre o Barracas), caso contrario, si se repitiera un empate, se definirá a través de los penales.

Por la superioridad mostrada en el primer partido en Morón, y el antecedente del partido ganado en Santiago del Estero ante Guemes, con todo en contra, se puede confiar, en un 100x100 en este equipo.

El partido : Partido vibrante, duro, áspero y de dientes apretados, jugado como una final. El visitante impresionó mejor de entrada, hasta que obtuvo el gol a través de un discutible penal. Sin embargo Morón fue quien hizo mejor las cosas, en la mayor parte del encuentro, y terminó estando mas cerca de ganarlo. Lo que mostró el Gallo para superar al cervecero, fue que atacó mas, quiso mas, jugó mas, y estuvo mas peligroso, y mas cerca de obtener el triunfo. Bastó que se asentaran en el medio, y se juntaran Gastón González y Orozco, para que el Gallo comenzara a merodear el área quilmeña con aproximaciones peligrosas. Villalba y Levato, a partir de ello, también tuvieron mas presencia y actividad. Por eso no extrañó que llegara el empate por un penal (esta vez, claro) que González, una vez mas, no falló. Todo se hizo de Morón, y tranquilamente se pudo haber ido en ventaja a los vestuarios, si Villalba no malogra una excelente e inmejorable oprtunidad, con un tiro que se le fue muy desviado. También González tuvo la suya, muy neta, que un defensor quilmeño alcanzó a interponerse. 

Siguió mejor Morón : En el segundo tiempo, siguió la misma tónica, Morón, superior, buscando y acercándose a desnivelar. Un tiro en el travesaño, y un penal no cobrado por el patético Herrera, fueron los avisos. Hasta que, tras una jugada peleando la pelota como siempre hay que pelearla, quedando Levato solo para ajusticiar al indefenso arquero cervero. Festejado y merecido el gol, para quedar arriba en el marcador. Morón, parecía tener mas chances de aumentar, si mantenía el ritmo, mientras que Quilmes, parecía no tener armas como para poder remontar esa diferencia. Pero los imponderables del fútbol se hicieron presentes, y Quimes, en un flojo momento suyo, llega al empate, con un tiro libre, raro, y curioso, que igual se convirtió en gol, por el rapto de lucidez que tuvo Facundo Silva. Muy poquito después, llegó la expulsión de Orozco (una mas, de local), también muy discutible, y allí Morón perdió a quien le aportaba la mayor claridad en la ofensiva, y la distribución y creación de juego. Todo se hizo mas peleado aún, pero parejo. Así hasta el final, Quilmes, que se conformaba, y Morón que ya no tuvo mas resto.

El árbitro y sus errores : Todos ellos, si, puede ser que hayan sido discutibles, pero justamente, los varios errores, o jugadas polémicas, en todas pejudicó al Gallo, nunca al cervecero. El penal favorable a Quilmes, cuanto menos, discutible, y es raro explicar, su vista tan fina para poder haberlo visto al instante. Una jugada confusa con empujones, prepoteos, y un cabezaso de un quilmeño. Finalmente, le saca la amarilla a dos jugadores, uno por bando, solo que se equivocó y al jugador cervecero que amonesto no fue al del incidente, Pons, y amonestó a otro. Pons, luego cometió otra infracción, que de no haber sido ese error, le hubiera valido la expulsión. Penal para Morón no cobrado : centro peligroso que dejaba a Levato solo con el arquero, pero el jugador es tomado por un defensa de Quilmes, y derribado, al borde del area. Herrera, no cobró, ni penal, ni tiro libre, nada, y siga siga. Estas, son puntuales, pero mas allá de estas, en decisiones menos importantes, nunca se mostró lo riguroso que debio haber sido ante varias jugadas fuertes que, estratégicamente, emplearon los visitantes.

La gente : Un párrafo aparte para lo que aportó el numerso público que concurrió al partido para alentar al Gallo. Un aliento ensordecedor, con un llamativo colorido, que coronó el espectacular recibimiento al equipo. Desde el partido en que se consagró Campeón ante Platense, bajo la presidencia de Alberto meyer, que no se veía tanta gente y tanto entusiasmo. Como siempre, se alentó y se gritó, como solo lo hace la gente del Gallo, hasta quedar sin voz. El final no fue el mas feliz, por el empate, pero el público, todo, premió con un fuerte aplauso la entrega de los jugadores, además, de seguir esperanzado, que en el partido de vuelta, el festejo si, será completo, porque se confía que la clasificaciónse vendrá para el oeste.